Nick Jonas ha demostrado ser de lo más goloso. El cantante no pudo resistir la tentación y entró a una tienda de chucherías en la que compró de todo. Mientras tanto, su cuñada, Ashley Greene, se volvía de lo más tímida ante la prensa.

Si hace unos días, Nick Jonas ya demostraba que le encanta a comer, el cantante aportó su granito de arena dándose una comilona junto a su hermano Kevin, ahora el pequeño de los Jonas Brothers se decantaba por su parte más golosa

Alojado en un hotel de Nueva York, el cantante salió a dar un paseo y, junto a parte de su equipo, no dudó en comprar algunas chucherías. Eso si, al día siguiente, Nick Jonas acudía a un acto contra la diabetes, enfermedad que él mismo padece, y lanzaba un mensaje a los adolescentes. “Quiero contar mi historia y decir que esto no me ha frenado”, decía.

Por su parte, y mientras él se mostraba de lo más goloso, su cuñada Ashley Greene se volvía de lo más tímida ante la prensa. La actriz de ‘Amanecer’ aprovechaba un pequeño descanso en el rodaje y salía de fiesta junto a unas amigas. Sin embargo, y a la salida del local, la actriz se molestó con la presencia de las cámaras. Tapándose la cara con las manos, Ashley Greene quiso evitar ser fotografiada.

Una actitud que no demuestra cuando está con su chico, Joe Jonas, con el que no tiene reparos en aparecer de lo más sonriente. De hecho, hasta se ha atrevido ha contar algunos detalles de su relación.